Exposición Valija Iberoamericana
El encuentro del encuentro, donde todo comenzó.
Con arte iberoamericano nos referimos a lo circunstancial de las expresiones artísticas que han surgido en América Latina y la península ibérica (España y Portugal) a lo largo de la historia. Fue justo desde el momento de su salida en el Puerto de Palos, puerto que prestó Huelva para la expedición colombina. Estas expresiones artísticas abarcan un amplio espectros de estilos, periodos y medios y reflejan la diversidad cultural acumuladas en siglos de intercambio e influencias de las diferentes culturas que han interactuado en la región. Entonces, ¿es una premisa cierta que cada lado del Atlántico puso su parte y una permeó a la otra? Pues la historia a dejado claro que no fue así. “Valija Iberoamericana” busca revindicar de alguna manera que, a pesar de la colonización dejó una sola cara de ala representación artística en territorio americano, también es verdad que la pureza de donde venimos nos coloca en el espacio y tiempo donde todo comenzó.
Citando a Bélgica Rodriguez, crítico e investigadora de Arte en el prólogo del Catálogo de “Colección Arte Valija Iberoamericana”: “En la muestra presentan artistas que han trabajado con la lógica vehemente de librarse tanto de la lógica formal de las vanguardias históricas, como de las actuales que pueblan la escena del arte internacional. Así, su eficiencia expresiva corresponde a interpretaciones y evaluaciones conceptuales de un lenguaje estético-plástico específico y singular que atomiza los estereotipos creados con un discursoplástico, que por definición corresponde a un proceso abierto a lo universal y lo planetario.” El concepto “encuentro del encuentro” se fundamenta en la formalidad de seguir siendo la bandera del arte contemporáneo en territorio europeo.
Oscar J. Patin G
Director de la Asociación de Arte Valija Iberoamericana
Comisario de la exposición
Reunir en un sitio muchos mundos es, a priori, un acto extraordinario
Crecí en casa de mi abuelo mirando el jardín desde su estudio y alimentado por la música clásica que ponía en su tocadiscos. Él había llenado aquel espacio de fotos, libros, pinturas y discos de vinilo. Entre ellos había uno que llamaba especialmente mi atención, un disco de Navidad que solo sonaba en aquella época. Yo me sentaba allí en el estudio a mirar ka portada de aquel disco como si fuera una pintura a la que admirar, el puerto de una ciudad muy diferente a las que yo conocía, un puerto nevado con farolas encendidas y niños jugando en la nieve. Y ahí, sentado, lo miraba mientras me llegaba el olor a chocolate y mole de la cocina de mi abuela.
Europa fue como cuando te dan una sorpresa en la que de pronto te quitan el pañuelo de los ojos. Vi la nieve en la ciudad por primera vez, la luz del día era diferente, la gente, la comida, los colores. Todo me decía que estaba en otro mundo. Un mundo que nada tenía que ver con el de los olores de la cocina de mi abuela pero si con aquella portada del disco de Navidad del estudio de mi abuelo.
Esta exposición no pretende ser un viaje meramente dicho sino una invitación a entrar y habitar cada uno de los mundos creados por un centenar de artistas uno por uno. Aunque resulte fácil decirlo, es extraordinario, 100 obras de distintos autores en un mismo espacio, la meseta del toro a este lado del mundo y en este siglo. Es la magia de la expresión humana, una fiesta de la pintura que no se rige por ninguna norma expositiva. La vuelta al puerto de aquella fotografía donde a través de los sueños y realidades se fue construyendo el camino que nos trae aquí ahora. El volver al origen.
«[…] Y lo primero pintado era la mano que pintaba.»
Erick Alcántara
Comisario de la exposición
Ernesto Cardenal, Cántico Cósmico, 1989, fragmento de la cántiga 14.
Sala de la Provincia. Diputación de Huelva
Del 28 de septiembre al 21 de octubre de 2023,
De lunes a viernes de 10:00 a 14:00 y de 17:00 a 21:00.
Sábado de 10:00 a 14:00.
