MARÍA SUERO

María Suero nace en Huelva, España en 1.978. En 1.998 se matricula en la única academia de Bellas Artes de la ciudad, al tiempo que empieza sus estudios de Magisterio.

Años más tarde, estudia cerámica artística. Desde el año 2.000 participa en exposiciones en salas dentro y fuera de su ciudad, tanto individuales como colectivas, algunas de carácter itinerante, en las que se puede contemplar: dibujo, pintura, cerámica, infografía e instalación.

En algunas ocasiones ha trabajado el campo de la ilustración en revistas literarias y antologías, así como colaboraciones en el atrezo de cortometrajes.

En la actualidad, trabaja en su taller donde compagina sus encargos y la docencia, al mismo tiempo que desarrolla su actividad artística y de donde surgen sus ideas, su obra, sus creaciones.

EL PROYECTO

María Suero lleva su obra a ARCO 2021. Su trabajo, personal, provocador, ha sido seleccionado para romper la monotonía, y activar en el visitante un estruendo de sensaciones.

Se ve en su obra seleccionada esa impronta poco vista en una Feria como ARCO, en un Madrid que ve y bebe de lo virtual, ahora que está de moda, pero que salpica con una pasmosa originalidad sacada seguramente de su expresión más provocadora y original.

Figuras humanas que recuerdan las tribulaciones de Westworld, tridentes pasajeros que cosechan rostros pálidos, con fondo en verde, paletas un tanto velazquianas con un mechón protagonista de ese mundo femenino que explora en su obra. Y una paleta colorista que nos envía al mundo onírico y pictórico son sus cartas credenciales para este ARCO distante.

Dibujo, pintura, cerámica, infografía... se entrecruzan en su obra relevante, provocadora y activa. Sus trabajos han marcado impronta en ilustraciones, revistas literarias y antologías sin olvidar el cetro de la expresión: el cine, el atrezo.

María Suero usa su expresión del arte para plasmar su ideario. Por eso en su obra “reflexiona sobre la feminidad y lo femenino, sobre la diferencia entre lo estereotipado y lo realmente sensible”. Ve, observa y amplifica “de forma lúdica un mundo imaginario en el que todas las mujeres han vivido alguna vez”. Sí, son los sentidos, los que buscan y hallan la propuesta que quiere expresar.

“Es una reflexión sobre cómo las cosas materiales mueren y los recuerdos no, sobre cómo atribuimos sentimientos a objetos materiales que caracterizan etapas vividas”... porque mirando y tocando su obra, llena de texturas, y colores se puede comprobar lo efímero y la fortaleza de los recuerdos. Y, como no, iba a ocurrir esto en una etapa como la infancia, llena de juego, con la Imaginación como protagonista y sus fetiches, los cuales son capaces de
resolver nuestro propio subconsciente a través de los sueños.

En ARCO un impacto visual puede sacarte del anonimato. Y su obra impacta, sí... y desgarra almas como lágrimas negras que se desparraman por los recuerdos que seremos.

Rafael Moreno
Periodista y escritor